Cuando los días sobran
Será quizás
entiendo
Porque se han cargado en exceso
De temporalidad
Vaciándose de Cielo
De cuanto es terráqueo
En olvido de Eternidad
Se ha roto pues el camino
Y la peregrinación nos lleva
A ninguna parte
Cuando los días sobran
Se vuelven
Fatigosos
Inútiles
Pesados
Vacíos
Resbalan sin cesar
Como las horas que corren
En puro desgaste
Cuando los días sobran
El sentido de la vida es débil
La superficialidad abunda
Y la acedia lo ha tornado
Todo insulso
Cuando los días sobran
Paradójicamente nos parece que faltan
Pero no son pocos los días
Es poca la sustancia en la que se sostienen
Cuando los días sobran
Dios está ausente
Aunque admito otras razones
Cuando los días le sobran al justo
Que por sendas de Sabiduría se afirma
Es que su entorno se halla corrupto
Y la decadencia
Virulentamente se ha elevado
A grados tan paroxísticos
De mundanal desenfreno
Que casi todo parece perdido
Como irremontable
El caudaloso y turbio río de pecado
Que la cerrazón del corazón ha desatado
Cuando los días le sobran al justo
Por la infestación del mal
Que crece sin límite
Al cual seguramente
Ha señalado con coraje en profecía
Y combatido sufriente en virtud
Solo le queda emigrar a otra tierra
Donde los días puedan encontrar condiciones
Para llenarse de Vida Divina
Finalmente
Cuando los días le sobran al místico
Es que Dios se le ha acercado tanto
Que ya no vive ni palpita en esta tierra
Sino que habita pasando la orilla