Escritos espirituales y florecillas de oración personal. Contemplaciones teologales tanto bíblicas como sobre la actualidad eclesial.
DIÁLOGO VIVO CON SAN JUAN DE LA CRUZ 44
CONVERSACIONES SUBIENDO AL MONTE 44
LOS BIENES ESPIRITUALES QUE DAN GOZO A LA VOLUNTAD. IMÁGENES Y RETRATOS. Advertencias y peligros.
“Así
como las imágenes son de gran provecho para acordarse de Dios y de los santos y
mover la voluntad a devoción usando de ellas (por vía ordinaria), como
conviene, así también serán para errar mucho si, cuando acaecen cosas
sobrenaturales acerca de ellas, no supiese el alma haberse como conviene para
ir a Dios. Porque uno de los medios con que el demonio coge a las almas
incautas con facilidad y las impide el camino de la verdad del espíritu, es por
cosas sobrenaturales y extraordinarias. Porque el astuto demonio, en esos
mismos medios que tenemos para remediarnos y ayudarnos, se procura disimular para
cogernos más incautos.” (SMC L3, Cap. 37,1)
Querido Fray Juan es
de esperar que cuando se juntan una conciencia religiosa infantil y algo que le
parezca a ella sobrenatural y extraordinario, sobrevengan malas
interpretaciones. Las englobaría a todas bajo el tópico de “superstición y
magia”. Así los pueblos en estadios primitivos suelen adjudicar
sobrenaturalidad a fenómenos climáticos y cósmicos con la subsiguiente
adoración animista de la naturaleza. La
capacidad de concebir un Dios trascendente, único y eterno no es inmediatamente
disponible al desarrollo humano. De hecho los niños en su religiosidad siguen
pendientes de los elementos materiales y las realidades tangibles; solo cuando
su esquema cognitivo alcance la madurez de la abstracción podrá dar un paso de
mayor espiritualización.
En mis días se puede
vislumbrar por ejemplo, cierto retorno del paganismo bajo diversas modas
esotéricas, que hacen habitual el encuentro con personas adultas –a veces
incluso con alguna formación académica- que sostienen creencias que los dejan
rehenes de secretas fuerzas superiores y energías no ordinariamente
manejables. Ha retornado pues un tiempo de
adivinos y brujos.
Porque la fe personal
no solo requiere de la maduración del intelecto sino también de la vida
afectiva. El crecimiento humano es proporcional al paradigma religioso que se
sustenta. La espiritualidad, en tanto esa mirada englobante de la realidad
desde la contigüidad al Misterio por el enriquecimiento de la vida teologal -fe,
esperanza y caridad-, también atraviesa etapas de desarrollo.
Por eso en la llamada “religiosidad popular”
–a veces tan sobrevalorada- existen elementos de fervor religioso importantes
pero aún básicos y múltiples prácticas que denotan necesidad de purificación y
maduración de la fe. Tras el cándido fervor admirado no pocas veces se esconde
una infantil dependencia de amuletos y fetiches. En este sentido el uso religioso
de imágenes, retratos e incluso sacramentales en la devoción no están exentos
de discernimiento acerca de ciertos presupuestos mágicos y supersticiosos que
puedan persistir. No se trata en principio de una idolatría –como gustan de acusarnos
otros cristianos a los católicos- sino de una inmadurez religiosa que debe ser
orientada y acompañada para su purificación.
La fe crece y madura
entre otras cosas por una adecuada educación. La vida misma tantísimas veces,
con todas sus circunstancias –sobre todo con la experiencia de la
contradicción, del sufrimiento y del mal-, nos dará múltiples oportunidades
para pulir, profundizar y madurar la fe poniendo en crisis nuestras
interpretaciones insuficientes.
“Por
tanto, para evitar todos los daños que al alma pueden tocar en este caso, que
son: o ser impedida de volar a Dios, o usar con bajo estilo e ignorantemente de
las imágenes, o ser engañado natural o sobrenaturalmente por ellas… también
para purificar el gozo de la voluntad en ellas y enderezar por ellas el alma a
Dios, que es el intento que en el uso de ellas tiene
Querido Doctor nos
recuerdas bien que el uso en la Iglesia de las imágenes religiosas apunta a que
el alma se dirija a Dios y la persona distinga lo vivo que representan. Y justamente
aquí se debe mostrar la caridad de la Iglesia con sus fieles ayudándoles a
discernir las motivaciones que sostienen sus ejercicios piadosos y
comprometiéndose pacientemente en una auténtica formación espiritual. Siempre
será más fácil sucumbir a la tentación paternalista de bendecirlo todo, a la
verdadera paternidad de acompañar corrigiendo y exhortando a crecer.
“Se
engañan a veces harto, pensando que ya están llenos de devoción porque se
sienten tener el gusto en estas cosas santas, y, por ventura, no es más que
condición y apetito natural, que, como se ponen en otras cosas, se ponen en
aquello.” (SMC L3, Cap. 38,1)
“La propiedad
y asimiento y apetito que tú tienes en estos ornatos y atavíos exteriores, de
tal manera te engolfan el sentido, que te impiden mucho el corazón de ir a Dios
y amarle y olvidarte de todas las cosas por su amor.” (SMC L3, Cap. 38,2)
Como el niño debe
pasar de lo tangible y concreto a lo abstracto para que su paradigma cognitivo
se desarrolle, así también los cristianos desde el uso de imágenes, retratos e
incluso sacramentales debiéramos remontarnos y volar hacia las realidades
celestiales y eternas. Un proceso de creciente interiorización y
espiritualización no debiera entenderse como una evasión de la encarnación y de
la temporalidad sino como su deseable reconducción teleológica hacia el
Misterio. El Verbo de Dios se hizo hombre para que el hombre pudiese realizar
su vocación divina.
POESÍA DEL ALMA UNIDA 33
Como lirio del desierto
Como amapola de la estepa
Crece tu Reino
No nos falta
El Pan de Dios
Cada día en el camino
Tu Fidelidad invicta
Sostiene nuestra vida
En el cimiento de la Cruz
Tu Espíritu mana
Regando nuestra tierra
Y desbordando la sacia con gozo
Recortada en las tinieblas
Tu Luz crece y se expande
¡Oh cálida y alegre esperanza!
Un alma entregada a la oración
Se une en silencio a su Esposo
Y se transforma en un vergel
Un corazón con hambre y sed
De tu Palabra poderosa firme y eficaz
Refulge serenamente luminoso en toda noche
Sobre un altar escondido y pobre
El Pan que baja del Cielo
Da Vida al mundo
Y todo ello está a la mano
Disponible y gratuito
Para quien lo reciba y tome
Una flor en el yermo
Se abre inesperada
Y exhala su perfume
Multitud de ellas se abren cada día
Crece tu Reino
Ante la mirada de la fe
Una fe que reina amada y amante
Junto al lirio del desierto milagroso
Y la maravillosa amapola de la estepa
DIÁLOGO VIVO CON SAN JUAN DE LA CRUZ 43
CONVERSACIONES SUBIENDO AL MONTE 43
LOS BIENES ESPIRITUALES QUE DAN GOZO A LA VOLUNTAD. IMÁGENES Y RETRATOS.
“A
cuatro géneros (de bienes) podemos reducir todos los que distintamente pueden
dar gozo a la voluntad, conviene a saber: motivos, provocativos, directivos y
perfectivos… Los motivos, que son: imágenes y retratos de Santos, oratorios y
ceremonias.” (SMC L3, Cap. 35,1)
Estimadísimo Fray
Juan, nos enseñas que son de cuatro tipos los bienes espirituales que alientan
gozo en la voluntad. Comencemos pues por las imágenes.
“Y
cuanto a lo que toca a las imágenes y retratos), puede haber mucha vanidad y
gozo vano, porque, siendo ellas tan importantes para el culto divino y tan
necesarias para mover la voluntad a devoción, como la aprobación y uso que
tiene de ellas nuestra Madre la Iglesia (muestra), (por lo cual siempre
conviene que nos aprovechemos de ellas para despertar nuestra tibieza), hay
muchas personas que ponen su gozo más en la pintura y ornato de ellas que no en
lo que representan.” (SMC L3, Cap. 35,2)
Ciertamente pones
reparo en que nuestra forma de servirnos de ellas sea demasiado superficial y
que nos quedemos en la sola visualización de su aspecto exterior –mirándolas
como una obra artística- y no reparemos en el misterio de fe que representan.
“El uso
de las imágenes para dos principales fines le ordenó
Por eso la imagen
religiosa debe tener cierta mínima calidad artística que mueva a la devoción,
representando con belleza y facilitando el movimiento de la piedad. Dicho sea
de paso en mis días, ese tipo de imágenes religiosas son onerosas
económicamente y generalmente se encuentran en los templos y oratorios más
antiguos e importantes. El pueblo fiel accede a imágenes comercializables que
no pocas veces son más bien un obstáculo por su baja calidad de producción.
“La
persona devota de veras en lo invisible principalmente pone su devoción, y
pocas imágenes ha menester y de pocas usa… si se las quitan, se pena muy poco;
porque la viva imagen busca dentro de sí, que es Cristo crucificado, en el cual
antes gusta de que todo se lo quiten y que todo le falte. Hasta los motivos y
medios que llegan más a Dios, quitándoselos, queda quieto. Porque mayor
perfección del alma es estar con tranquilidad y gozo en la privación de estos
motivos que en la posesión con apetito y asimiento de ellos.” (SMC L3, Cap.
35,5)
Aquí pues la gran
advertencia: el modo de uso de las imágenes religiosas puede ser un buen
parámetro de discernimiento acerca del proceso de maduración de la fe personal.
Como los niños hasta cierta edad no son capaces de realizar razonamientos que
supongan la abstracción intelectual y por tanto todo su conocimiento se basa en
lo tangible y concreto, así hay personas devotas que sin imágenes piadosas
exteriores no encontrarían en su corazón impulso para la piedad. Se las debe
mover por fuera pues por dentro la motivación es escasa. Vale decir, su vida
interior es pobre y poco cultivada.
Nos acercamos Fray
Juan a esta temática análogamente. Cuanto más la oración se vaya interiorizando
el fiel sacará menos provecho de representaciones exteriores y más de las internas
como el niño que pasa del pensamiento concreto al abstracto. Y cuando el orante
va entrando en quietud –o sea en recogimiento interior infuso- ya va dejando
atrás no solo recitaciones, meditaciones y otros medios más activos, sino
también representaciones interiores; de hecho intentar volver a todo ello le
disturba más que ayudarle. Así el creyente que va enriqueciéndose interiormente
usa menos de imágenes piadosas exteriores o representaciones internas y se
siente volcado a retirarse a la profundidad escondida donde sabe que Dios lo
habite y gusta de su Presencia viva dentro de sí. Que claramente es muy
superior el encuentro con el Dios que inhabita que la devoción que surja de la
percepción de imágenes religiosas talladas por manos de hombre por valiosas
artísticamente y bellas que fuesen o de representaciones internas vía la
imaginación o fantasía. Es de sentido común quedarse con la realidad y no con
sus representaciones.
“Tenga
por cierto el alma que, cuanto más asida con propiedad estuviere a la imagen o
motivo, tanto menos subirá a Dios su devoción y oración.” (SMC L3, Cap. 35,6)
Por tanto el consejo
es aprovecharse de imágenes y retratos religiosos como un medio muy inicial de
impulso de la devoción y piedad pero no quedarse en ellas sino más bien ir
siempre más hacia el interior por el recogimiento sobre sí en la búsqueda del
Dios que nos habita. Seguramente será más rico y hondo el movimiento de
devoción frente a una imagen religiosa que brota de un corazón trabajado por la
Gracia que desde sí mismo conecta con la representación mediante el rico bagaje
de su vida interior, que quien falto de profundidad espiritual mendiga de una
imagen religiosa le transmita aquello que no tiene en sí mismo.
“Como
haya devoción y fe, cualquiera imagen bastará; mas si no la hay, ninguna
bastará.” (SMC L3, Cap. 36,3)
POESÍA DEL ALMA UNIDA 32
Cuando los días sobran
Será quizás
entiendo
Porque se han cargado en exceso
De temporalidad
Vaciándose de Cielo
De cuanto es terráqueo
En olvido de Eternidad
Se ha roto pues el camino
Y la peregrinación nos lleva
A ninguna parte
Cuando los días sobran
Se vuelven
Fatigosos
Inútiles
Pesados
Vacíos
Resbalan sin cesar
Como las horas que corren
En puro desgaste
Cuando los días sobran
El sentido de la vida es débil
La superficialidad abunda
Y la acedia lo ha tornado
Todo insulso
Cuando los días sobran
Paradójicamente nos parece que faltan
Pero no son pocos los días
Es poca la sustancia en la que se sostienen
Cuando los días sobran
Dios está ausente
Aunque admito otras razones
Cuando los días le sobran al justo
Que por sendas de Sabiduría se afirma
Es que su entorno se halla corrupto
Y la decadencia
Virulentamente se ha elevado
A grados tan paroxísticos
De mundanal desenfreno
Que casi todo parece perdido
Como irremontable
El caudaloso y turbio río de pecado
Que la cerrazón del corazón ha desatado
Cuando los días le sobran al justo
Por la infestación del mal
Que crece sin límite
Al cual seguramente
Ha señalado con coraje en profecía
Y combatido sufriente en virtud
Solo le queda emigrar a otra tierra
Donde los días puedan encontrar condiciones
Para llenarse de Vida Divina
Finalmente
Cuando los días le sobran al místico
Es que Dios se le ha acercado tanto
Que ya no vive ni palpita en esta tierra
Sino que habita pasando la orilla
POESÍA DEL ALMA UNIDA 31
En esta hora de trasiego
No quisiera yo escribir
Una canción de atardeceres
Sino una límpida y pura
Melodía de esperanza
Sin embargo se levantan
La endecha y la elegía
Y se me solicita sollozar lamentaciones
Por aquella mujer que se ha
perdido
Supo ser esposa y madre
Pero cayó
Tristemente subyugada
En los brazos numerosos
De sus pérfidos amantes viles
Se entregó pues la pobre al desvarío
Y no hubo amigo del Esposo
Que al acercársele
Lograra administrarle medicina
O devolverla a su recuerdo
santo
Por tanto ahora en mi partida
Comprendo la tarea por delante
Iré por
los caminos preguntando
¿Saben dónde hallar
Díganme se los ruego
A la esposa de mi Amigo?
Ojalá la redescubra
Allende donde me dirijo
Así
tendré contento
Al contemplarla desposada
Entre los brazos del Amado
Oh Iglesia mía
Oh esposa Suya
No una
canción de atardeceres
Sino una límpida y pura
Melodía de esperanza
DIÁLOGO VIVO CON SAN PABLO 42
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